Por qué te interesa conocer el preahorro

Son muchas las estrategias y caminos que se nos ofrecen para tratar de mejorar el ahorro. Sin embargo, para quien no está habituado a ahorrar, prácticamente ninguna es eficaz. No hay que desesperar: el pre ahorro puede ser una gran estrategia en estos casos.

AHORRAR

Vaya por delante que para ahorrar hay que tener la voluntad de hacerlo. Incluso estrategias tan agresivas como el pre ahorro pueden no funcionar si no se tiene la voluntad y energía suficiente. Pero, una vez tomada la decisión de aplicar el hábito del ahorro, realmente es un modelo sencillo, cómodo y muy eficaz.

¿Qué es preahorrar?

Es un modelo de ahorro que se concibe en aquellos casos en los que resulta complicado plantearse ahorrar por decisión propia. Se basa en una especie de situación en la cual ya no hay vuelta atrás una vez tomada la decisión.

Lógicamente, esto es simplemente una estrategia ya que siempre se puede anular el pre ahorro, pero, hacerlo implica una serie de pasos reflexivos que son más complejos de dar (aunque igual de rápidos), que el simple mecanismo mental de no guardar dinero.

Básicamente consiste en aplicar una estrategia sencilla: no puedo decidir sobre lo que no llega a mi bolsillo, o en este caso a mí cuenta bancaria.

No hay un único modelo de pre ahorro aunque el más eficaz probablemente es el que se automatiza. En resumen, consiste en apartar de manera inmediata y según se reciben los ingresos, la cantidad que hemos decidido ahorrar para que no llegue a nuestra cuenta de gasto en ningún caso.

Preahorro automático

Es probablemente la forma más sencilla de ahorrar. Consiste en llegar a un acuerdo con un producto o herramienta bancaria.

El producto se activará automáticamente según nuestros ingresos llegan a la cuenta bancaria correspondiente, de esta manera, automáticamente se procede a separar de nuestra cuenta de gastos el dinero que se destina producto de ahorro.

Es decir, no va a llegar a tu cuenta sino que directamente va a ir a la herramienta o producto seleccionado.

El beneficio que esto proporciona es grande ya que al no contar con ese dinero, en primer lugar, nos obligamos a tener que realizar un mejor control del gasto (algo siempre importante).

Por otro lado, cara a mejorar nuestro nivel de ahorro, también es notable el impulso que esto logra ya que no debemos preocuparnos de las decisiones (éstas se toman por sí solas ya que el sistema automatizado no nos permite intervenir.

Lógicamente, en cualquier momento podemos suspender el modelo de ahorro, pero ya nos obligaría a tener que tomar decisiones y reflexionar sobre ellas: es mucho más probable que tomemos la decisión correcta (la de ahorrar), si reflexionamos sobre el nivel de gasto y la importancia del ahorro que si lo hacemos de manera mecánica porque nuestra decisión es inmediata.

Publicidad