-España ha vuelto a los mercados financieros. Y en opinión de los expertos de BBVA Corporate & Investment Banking, lo ha hecho para quedarse. Tanto es así que anticipan que la bolsa española ha entrado en un «largo ciclo alcista». Es más, concretan que la mejoría de los resulltados empresariales puede impulsar al Ibex 35 hasta un 40% en los tres próximos años. Es decir, para 2016 podría caminar de nuevo por encima de los 13.000 puntos.

El primer paso en ese recorrido lo dará en 2014, ejercicio en el que atisban un potencial del 17% con respecto a los niveles actuales, puesto que consideran que el Ibex podría despedir el próximo año en los 11.000 puntos. En lo que respecta a otros índices, el EuroStoxx 50 podria escalar hasta los 3.600 puntos, un 21% por encima del nivel actial, y el S&P 500 estadounidense, hasta los 1.900 puntos, con lo que tendría un potencial alcista más limitado, del 6,3%.

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El favorable panorama que esperan para la renta variable se acompañado por una evolución igualmente positiva para la deuda pública. En opinión de Antonio Pulido, director de BBVA Global Markets Research, el descenso de los diferenciales «aún tiene margen» para prolongarse. Por este motivo, anticipan que la prima de riesgo española, que mide la diferencia entre la rentabilidad de los bonos a 10 años y el rendimiento de los títulos alemanes con igual vencimiento, continuará estrechándose y pasará de los 226 puntos básicos actuales hasta moverse por debajo de los 200 puntos en 2014 y caer incluso hasta los 180.

«De círculo vicioso a círculo virtuoso»

Para Pulido, conviene visualizar y analizar la situación de España en su conjunto, y aunque recnoce que «no se puede decir que las cosas vayan bien con un 26% de paro», subraya que «la dinámica ha cambiado y el mercado empieza a valorarlo». «El mercado tiene totalmente descontado que la crisis del euro está superada y que España está acometiendo las reformas para corregir los desequilibrios estructurales. Esperamos que los inversores avancen y comiencen a poner en valor un posible cambio de tendencia en el ciclo económico y de beneficios», sostiene.

A su juicio, el cambio de tendencia visto en España, que es percibido por los inversores internacionales, comenzó con la fase de «reconocimiento» en 2011, es decir, cuando se admitió la realidad y la necesidad de adoptar reformas. A partir de ese momento, se pusieron en marcha procesos, como el saneamiento del sector financiero, la corrección de los desequilibrios, la reducción del déficit público, la mejora de la competitividad, el respaldo del Banco Central Europeo (BCE) y la apertura de los mercados de capitales a las compañías, que, en su conjunto, han modificado el panorama de España. Si, además, durante 2014 se produce el retorno del crédito y mejora el acceso a los mercados de capitales para las pequeñas y medianas empresas (pymes) porque se reduce la fragmentación financiera, esta acumulación de ingredientes debería traducirse «en una mejora de los indicadores económicos» como la que ya se está empezando a ver, explica Pulido.

El secreto está en los resultados

Aunque desde la firma reconocen que el mercado ya ha recogido en los precios que la crisis del euro ya no es un riesgo sistémico, al mismo tiempo precisan que «España mantiene el atractivo para los inversores» porque existen otros trampolines que aún no están descontados. Principalmente uno: la mejoría de los beneficios.

Para Ana Munera, directora de Equity de Global Markets Research, representa el auténtico secreto que esconde el Ibex y que puede impulsarlo en los próximos ejercicios. «Estamos en un punto de inflexión en los beneficios, que esperamos que comiencen a revisarse al alza en los próximos meses», pronostica. Dos ingredientes adicionales, como la mejora de liquidez de las compañías y la reducción de la prima de riesgo de la bolsa completan la fórmula que puede catapultar al Ibex entre un 35 y un 40% en los tres próximos años.

A todo ello ha contribuido el cambio de percepción que envuelve ahora a España. «La situación es muy diferente. Ahora España tiene visibilidad. Sabemos qué viene después, y eso es muy importante para los inversores, que buscan anticiparse a los siguientes pasos. Esa visibilidad es la que anticipa ese largo ciclo alcista para las bolsas». Elconfidencial